Un equipo de desarrolladores perfeccionando perros robots en Proyecto LASSIE. Este cuadrúpedo robótico, de apariencia canina, posee la capacidad de maniobrar a través de los terrenos irregulares lunares muy desafiantes, tales como cráteres y otras superficies planetarias complicadas.
El desafío de los perros robots en Proyecto LASSIE
Este proyecto es patrocinado por la NASA y lleva a cabo sus investigaciones con la colaboración de diversas universidades y del Centro Espacial Johnson. Recientemente, este grupo de investigadores ha puesto a prueba a un robot cuadrúpedo llamado «Spirit» en el glaciar Palmer del monte Hood, Oregón.
[post_relacionado]Las pruebas se realizaron en un período de cinco días durante el verano pasado, experimentado con el robot Spirit, y estableciendo pruebas en diferentes tipos de terreno que incluyen barro, nieve suelta y rocas, utilizando sus piernas autónomas, con características metálicas y resistentes.
Feifei Qian, líder del proyecto y profesor en la Escuela de Ingeniería Viterbi y la Escuela de Computación Avanzada de USC, demostró la importancia de que los robots puedan percibir y adaptarse instantáneamente a la interacción con el suelo, para optimizar de manera natural su desplazamiento.
El principal objetivo de las pruebas de Spirit es prepararlo para futuras misiones de exploración planetaria. Durante estas pruebas, se recopiló valiosa información sobre las características del suelo y las mejores técnicas de locomoción en este tipo de superficies, que serán fundamentales para futuras exploraciones en la Luna y otros planetas.
Qian mencionó que los desafíos encontrados, como el deslizamiento en el hielo o el hundimiento en la nieve, son inspiración para desarrollar nuevas estrategias que puedan expandir los horizontes de la ciencia y tecnología humanas. Este aprendizaje continuo a partir de fallos observados es crucial para el avance del proyecto.
El equipo también ha señalado que un robot puede experimentar dificultades similares a las humanas al caminar sobre superficies irregulares, lo que permite un mayor entendimiento del funcionamiento y sus complejidades sistemáticas.
Tras dominar terrenos desde las arenosas playas de California hasta los suaves gránulos del Parque Nacional White Sands en Nuevo México, Spirit ha demostrado su capacidad de adaptación. Las imágenes obtenidas en el monte Hood, presentan paisajes surrealistas que simulan las condiciones extraterrestres, preparando al robot Spirit para misiones futuras más allá de la Tierra.
Para ampliar sus capacidades de exploración, el equipo de Qian, con una subvención de dos millones de dólares de la NASA, trabaja en el desarrollo de más robots cuadrúpedos bajo el proyecto TRUSSES. Estos robots colaborarán entre sí para superar obstáculos y compartir información crítica durante las misiones, formando un mapa colectivo de riesgos que guiará sus exploraciones planetarias.
Los experimentos del Robot Spirit. Fuente: USC Viterbi
Los robots podrían transformarse en estructuras útiles como puentes o pirámides para asistir a otros en terrenos difíciles, un concepto que revoluciona las estrategias de rescate y exploración.
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Fuente y foto: USC Viterbi School of Engineering