En Estados Unidos se busca reducir las emisiones de las plantas de energía por medio de la Agencia de Protección Ambiental (EPA), excluyendo las regulaciones sobre la co-combustión de hidrógeno en las normativas recién emitidas. Este cambio representa una revisión significativa en comparación con las expectativas previas.
Costos del hidrógeno superan expectativas iniciales
El costo proyectado del hidrógeno ha excedido las estimaciones iniciales. La EPA había considerado previamente que el hidrógeno estaría disponible a un costo accesible de $0,50 por kilogramo para 2032, sin embargo, las nuevas proyecciones elevan el costo a $1,15 por kilogramo. Este incremento se debe en parte a los subsidios establecidos por la Ley de Reducción de la Inflación, pero aun así, los precios son considerados demasiado elevados por el sector energético, que está dispuesto a pagar entre $0,40 y $0,50 por kilogramo, según un informe del Departamento de Energía (DOE) del año anterior.
[post_relacionado]La agencia también ha expresado dudas sobre la disponibilidad futura de hidrógeno de baja emisión de carbono, argumentando que podría no ser suficiente para cumplir con los estándares propuestos.
Aunque la EPA ha dejado la puerta abierta para que las plantas opten por la co-combustión de hidrógeno más adelante, el impacto inmediato en la industria del hidrógeno será mucho menor que las 320.000 toneladas por año de demanda que la EPA había anticipado inicialmente.
EPA posterga estándar de carbono para hidrógeno en cocombustión
También se descartó una propuesta previa de la EPA para establecer un estándar de intensidad de carbono para el hidrógeno usado en la co-combustión. La agencia optó por esperar las definiciones finales del Tesoro sobre los límites de emisiones que determinarán qué hidrógeno puede ser considerado limpio. Se ha establecido que cualquier hidrógeno, independientemente de su método de producción, deberá cumplir con las normas uniformes de combustibles de la EPA.
Al final, es poco probable que el limitado suministro actual de hidrógeno se desvíe a las plantas de energía, dado que competirían con otros sectores por este recurso. La ubicación de los futuros usuarios de hidrógeno limpio cercana a los puntos de producción también limitará las posibilidades de las plantas de energía de ser clientes viables. La EPA considera que la prioridad debería ser utilizar unidades más eficientes en lugar de depender de hidrógeno en calderas o unidades generadoras de vapor alimentadas por gas.
Avances en las plantas de energía prometen futuro renovable
Mientras tanto, la tecnología de hidrógeno sigue avanzando, y se están desarrollando turbinas de combustión que pueden operar eficientemente con hidrógeno. Estos avances podrían permitir un futuro reconsideración de su uso en la generación de energía, dependiendo de cómo evolucione la disponibilidad y el precio del hidrógeno en los próximos años.
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Fuente: argusmedia.com
Foto: Shutterstock