La Misión Peregrine 1 marcará el regreso de Estados Unidos a la superficie lunar con un aterrizador construido por Astrobotic, en colaboración con la NASA. Este aterrizador, también conocido como módulo de aterrizaje lunar Peregrine, tiene como objetivo llevar a cabo estudios detallados de la exosfera, propiedades térmicas, campos magnéticos y entorno de radiación del satélite. Además, se llevarán a cabo pruebas de paneles solares avanzados durante la misión.
Estados Unidos más cerca de volver a la Luna
El aterrizaje en la superficie del satélite está programado para el 25 de enero y marca un hito importante, ya que es la primera vez en medio siglo que Estados Unidos retorna al satélite terrestre después de las misiones Apolo.
[post_relacionado]Este proyecto fue elegido a través de la iniciativa Commercial Lunar Payload Services (CLPS) de la NASA, en la que la agencia espacial colabora con socios comerciales para proporcionar el lanzamiento y el módulo de aterrizaje.
El Peregrine Mission 1 tiene dimensiones aproximadas de 1,9 metros de altura y 2,5 metros de ancho, adoptando la forma de un cuerpo principal en caja con cuatro patas de apoyo. Esta misión llevará alrededor de 10 cargas útiles de diversos tipos, con una capacidad de carga útil de aproximadamente 90 Kg.
Entre las cargas útiles científicas se encuentran el conjunto de retrorreflectores láser (LRA), el espectrómetro de transferencia lineal de energía (LETS), el sistema de espectrómetro volátil de infrarrojo cercano (NIRVSS), el espectrómetro de masas con trampa de iones PROSPECT (PITMS) y el sistema de espectrómetro de neutrones (NSS), entre otros.
Cabe destacar que el despegue de la misión se llevará a cabo desde Cabo Cañaveral mediante un cohete Vulcan Centaur proporcionado por United Launch Alliance. Después de pasar de 3 a 33 días en órbita terrestre y realizar un viaje hacia el satélite, seguido por una fase de órbita lunar que durará de 4 a 25 días, la nave se dirigirá hacia Sinus Viscositatis (Bahía de la Pegajosidad), ubicada junto a los Domos Gruitheisen en el extremo noreste de Oceanus Procellarum (Océano de Tormentas).
Se espera que el módulo de aterrizaje opere durante aproximadamente 192 horas.
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Fuente: latribunadetoledo.es