En un futuro no muy lejano, las ciudades podrían estar construidas con materiales que provengan directamente de la corteza terrestre, como la lava volcánica, por ejemplo. Este es el concepto detrás de «Lavaforming,» un proyecto que imagina un mundo donde la arquitectura y la naturaleza trabajan en armonía para crear estructuras sostenibles y futuristas.
Bajo este contexto, un arquitecto de Islandia llamado Arnhildur Pálmadóttir explora cómo transformar los flujos de lava en la base de ciudades enteras, marcando un precedente en el diseño sostenible y en el aprovechamiento de los recursos naturales.
Lava volcánica como material de construcción
[post_relacionado]Imagina un edificio que se forma directamente de la roca fundida, moldeado por las fuerzas de la naturaleza y construido con la energía geotérmica del entorno. Esto es lo que Pálmadóttir está proponiendo con su proyecto «Lavaforming». Inspirándose en las antiguas erupciones volcánicas que dieron forma al paisaje islandés durante la época de Snorri Sturluson, este proyecto plantea una visión para el año 2150, donde la lava volcánica se convierte en el material de construcción principal.
«En nuestra historia,» explica, «hemos logrado aprovechar el flujo de lava, tal como hicimos con la energía geotérmica hace 200 años en Islandia.» Esta propuesta tiene como objetivo mostrar cómo la arquitectura puede ser una fuerza que reconsidere y dé forma a un futuro más sostenible, en lugar de simplemente construir estructuras.
En la actualidad, la industria de la construcción depende en gran medida de la extracción de materiales y la generación de energía no renovable, lo que contribuye al cambio climático y al agotamiento de los recursos naturales. Sin embargo, «Lavaforming» ofrece una alternativa radical: utilizar un recurso natural y renovable que se encuentra directamente bajo nuestros pies. El flujo de lava no solo es abundante en zonas volcánicas, sino que también puede contener suficiente material para establecer los cimientos de una ciudad en cuestión de semanas.
Esto eliminaría la necesidad de recurrir a métodos tradicionales de minería y reduciría la huella ambiental de la construcción. Además, la utilización de la energía geotérmica para transformar la lava en material de construcción es un paso hacia la creación de ciudades verdaderamente sostenibles.
Sin dudas, el concepto de «Lavaforming» abre las puertas a un mundo donde la arquitectura y la naturaleza se unen para crear ciudades que, además de ser sostenibles, serían también sorprendentes y llenas de historia. Al aprovechar los materiales y la energía que proporciona el entorno, los arquitectos están planteando una revolución en la forma en que concebimos el diseño urbano y la construcción.
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Fuente: Lavaforming
Foto: shutterstock