La empresa ORPC Irlanda y la Universidad Queen’s de Belfast han culminado con éxito el despliegue y el inicio de pruebas de una turbina de energía mareomotriz de última generación en el sitio de pruebas de mareas de Strangford Lough, Irlanda del Norte.
El despliegue exitoso de la turbina de energía mareomotriz
Este logro registra que ORPC logra la generación de electricidad, por primera vez, fuera de América del Norte, tras diecisiete instalaciones en los Estados Unidos y Canadá, consolidando su compromiso de expandir la generación de energía limpia a nivel internacional.
[post_relacionado]El despliegue se enmarca en el proyecto X-Flow, liderado por la Universidad Queen’s de Belfast y apoyado por el Centro para la Energía Sostenible Avanzada (CASE) a través del Fondo de Desafío de Innovación Verde.
El objetivo es analizar el rendimiento de esta turbina de flujo cruzado en condiciones reales de marea, tras pruebas iniciales realizadas en el tanque de remolque del Consiglio Nazionale delle Ricerche en Italia, dentro del proyecto CRIMSON financiado por la Comisión Europea.
El profesor titular en la Universidad Queen’s de Belfast, Carwyn Frost, indicó que el proyecto X-Flow en Strangford Lough permitirá evaluar «cómo las condiciones de flujo turbulento» afectan el rendimiento y la durabilidad de la turbina de ORPC.
“Nuestro sitio de pruebas en Queen’s brinda una oportunidad única para que los desarrolladores puedan monitorear su tecnología en flujos de marea reales, lo cual es esencial para futuros enfoques de mantenimiento predictivo y optimización operativa”, explicó Frost.
El director de operaciones europeas en ORPC Irlanda, Patrick Cronin, resaltó el valor del proyecto para maximizar la eficiencia y sostenibilidad de sus sistemas de energía. “Estamos encantados de colaborar con Queen’s University, el equipo de X-Flow y nuestros socios industriales locales en este primer despliegue en Europa. Este esfuerzo conjunto es un hito importante en nuestra misión de llevar energía limpia y predecible a mercados globales”, afirmó Cronin.
En la siguiente fase, la turbina será sometida a múltiples pruebas para analizar su desempeño en distintos escenarios de flujo. Además, los datos recolectados contribuirán al desarrollo de modelos numéricos avanzados que mejorarán la precisión en el diseño de la turbina de energía mareomotriz en el futuro.
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