El equipo de Boeing llevó a cabo una extensiva prueba en la nave espacial, bajo el acoplamiento de Starliner, evaluando los propulsores del Sistema de Control de Reacción (RCS) y verificando el sistema de helio. Este ensayo se constituye como la segunda prueba exitosa de este tipo, para recopilar información adicional antes del retorno de la prueba de vuelo tripulada a la Tierra.
El acoplamiento de Starliner exitoso
Bajo la dirección de Chloe Mehring, directora de vuelo de Starliner, y con ingenieros de Boeing monitoreando desde la consola, los controladores de vuelo activaron secuencialmente 27 propulsores RCS. Mehring, quien liderará el equipo durante el desacoplamiento de la Estación Espacial Internacional (ISS), resaltó la excelente coordinación entre los equipos de Starliner y la ISS, que permitió ejecutar la secuencia de encendido y apagado de manera segura con efectividad.
[post_relacionado]Cada una de las ejecuciones de los propulsores fueron diseñados para confirmar su rendimiento individual. Aquellos orientados hacia atrás se encendieron durante 1,2 segundos, mientras que los demás lo hicieron durante 0,40 segundos. Tras cada ejecución, el equipo revisó los datos en tiempo real, confirmando que todos los propulsores operaron dentro de los parámetros nominales, con valores de empuje que oscilaron entre el 97% y el 102%. Además, se verificó la estabilidad del sistema de helio y se solucionó un problema previo con una válvula de aislamiento del oxidante RCS, que ahora funciona correctamente tras varias activaciones durante la prueba.
Este logro marca la segunda ocasión en que la nave espacial se enciende exitosamente mientras está acoplada, demostrando la capacidad de los equipos de la estación y Starliner para llevar a cabo operaciones integradas durante futuras misiones prolongadas.
Los astronautas Butch Wilmore y Suni Williams, quienes formaron parte de la tripulación de prueba, estuvieron dentro de la Starliner Calypso y proporcionaron información en tiempo real al equipo en tierra. En preparación para su regreso, Wilmore y Williams participarán en dos simulaciones de desacoplamiento y aterrizaje la próxima semana.
De momento, se ha programado una revisión de preparación para las pruebas de vuelo a finales de la próxima semana. Durante esta prueba, los datos recopilados serán analizados y se incorporarán en la justificación del vuelo de regreso. Aunque aún no se ha definido una fecha exacta para el aterrizaje, se considera que las oportunidades estarán disponibles a lo largo del mes de agosto.
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Fuente y foto: Starliner Updates / Boeing