Investigadores de la Universidad de Washington, bajo la dirección de Robert Wood y Sarah Doherty, han realizado pruebas innovadoras en San Francisco que buscan evaluar la factibilidad de incrementar el albedo o capacidad de reflexión de las nubes marinas.
El equipo de científicos está experimentando el proceso de blanqueamiento de nubes destinado a combatir el cambio climático mediante el «enfriamiento del planeta» debido a que su enfoque se centra en aumentar la capacidad de la Tierra para reflejar la radiación solar de vuelta al espacio, utilizando aerosoles de sal marina para potencialmente disminuir la temperatura global.
Blanqueamiento de nubes para refrescar el planeta
[post_relacionado]El proceso conocido como blanqueamiento de nubes es un método de geoingeniería que busca aumentar la reflexión de la luz solar usando nubes estrato, que son bajas y densas. La técnica implica dispersar aerosoles con partículas de sal marina en la atmósfera. Estas actúan como núcleos de condensación para las gotas de agua, haciendo que las nubes se vuelvan más brillantes y, por ende, reflejen más luz solar hacia el espacio.
A medida que el cambio climático avanza con aumentos en las emisiones de carbono y temperaturas globales récord, la comunidad científica está considerando alternativas radicales para mitigarlo, bajo el entendimiento de que, aunque deberían ser opciones de último recurso, es crucial comprender su funcionamiento y potencial.
Doherty explicó al New York Times que estas técnicas son vistas como un plan B y no como soluciones primarias al calentamiento del planeta. La estrategia principal sigue siendo reducir el uso de combustibles fósiles, un punto en el que coinciden investigadores y activistas ambientales. «Con cada año que establece nuevos récords de cambio climático y temperaturas extremas, nos vemos impulsados a buscar más alternativas, incluso aquellas que antes considerábamos extremas«, agregó Robert Wood.
La modificación del clima, sin embargo, no está exenta de controversias. Organizaciones como Greenpeace y Friends of the Earth han expresado preocupaciones sobre los posibles efectos secundarios de estas intervenciones en los patrones climáticos y ecosistemas. «Este es un futuro que deberíamos intentar evitar a toda costa«, comentó David Santillo de Greenpeace al Times.
La exploración de técnicas como el blanqueamiento de nubes marinas destaca la importancia de evaluar cuidadosamente las soluciones de geoingeniería tanto por su eficacia como por sus posibles impactos en los ecosistemas globales. Aprender de los procesos naturales y adaptarlos de manera responsable puede ofrecer lecciones valiosas para abordar desafíos ambientales futuros.
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Fuente y foto: infobae.com